Según el origen, el propóleo está constituido entre un 30 a un 60 % por aldehídos fenólicos y polifenólicos , ésteres, cumarinas y flavonoides.
Son precisamente los flavonoides, entre los que destacan las flavonas, flavonoles, flavononas, dihidroflavonoles; los que dan las valiosas propiedades terapéuticas al propóleo.
Panales con propóleos. © mielarlanza.com
Los flavonoides ejercen las siguientes funciones:
- Aumentan la acción de las catecolaminas, retardando su oxidación y estimulando su liberación.
- Inhiben la liberación de histamina.
- Estimulan la síntesis de colágenos de las paredes vasculares.
- Aumentan la resistencia del colágeno.
- Protegen al colágeno contra los radicales libres.
- Inhiben la colagenasa.
- Refuerzan la película endotelial de fribrina.
- Disminuyen la fragilidad y permeabilidad de los vasos sanguíneos, y causan la vasoconstricción de los capilares.
- Tienen efecto vasodilatador e hipotensivo sobre el sistema circulatorio.
- Realizan una acción diurética.
- Tienen función colerética (aumentan la producción de bilis).
- Reducen la circulación periférica.
- Ejercen acción estrogénica.
- Poseen efecto sobre otras glándulas de secreción interna (timo, tiroides,páncreas, suprarrenales).
- Tienen efecto antibacteriano, antiviral, antiparasitario y coagulante.