Para empezar, es conveniente saber, como calcular el peso del polen en cucharadas:
1 cucharadita de café rasa: 5 gr de polen seco.
1 cucharadita de café colmada: 8 gr de polen seco.
1 cucharadita de postre rasa: 10 gr de polen seco.
1 cucharadita de postre colmada: 15 gr de polen seco.
1 cucharada sopera rasa: 15 gr de polen seco.
1 cucharada sopera colmada: 25 gr de polen seco.
De esta forma tan sencilla, podemos saber las dosis terapéuticas y de mantenimiento, calculadas en gramos y cucharadas.
Polen de abeja de los Sabinares del Arlanza. © mielarlanza.com
DOSIS.
Adultos:
Dosis terapéutica diaria: 32 gr (4 cucharaditas de café colmadas)
Dosis de mantenimiento: 20 gr (2 cucharaditas de postre rasas)
Niños de 3 a 5 años:
Dosis terapéutica diaria: 12 gr (un poco menos de una cucharada de postre colmada)
Niños de 6 a 12 años:
Dosis terapéutica diaria: 16 gr (algo más de una cucharada sopera rasa)
Niños mayores de 12 años:
Dosis terapéutica diaria: 20 gr (2 cucharaditas de postre rasas)
Se recomienda tomar polen durante 20 días y descansar 10, repitiendo lo mismo todos los meses según las necesidades. Esto sería suficiente para recuperar la salud, el vigor y el dinamismo.
Consumo.
El momento más favorable para tomar el polen parece ser por la mañana, antes del desayuno.
Es aconsejable moler el polen antes de su consumo, se puede hacer con cualquier molinillo de los que tenemos por casa.
El sabor del polen varía mucho, dependiendo de las flores donde ha sido recolectado. Se puede tomar al natural, pero si su sabor nos desagrada, podemos tomarlo con cualquier clase de líquidos. Se puede mezclar con leche, café con leche, leche con cacao, yogures, zumos de fruta, etc.
Una buena costumbre, que desgraciadamente ya se ha perdido, es prepararnos para desayunar o merendar, una buena rebanada de pan con miel untada, a la que añadiremos una buena capa de polen; deliciosamente nutritivo.
Precauciones.
No se conocen contraindicaciones, por lo que el polen puede ser tornado por todo el mundo.
La única excepción es la de personas alérgicas, como precaución, hay que empezar tomando una pequeña cantidad hasta asegurar su tolerancia en personas que puedan tener alergia a productos derivados de las abejas, o sufran asma.
Los alérgicos pueden desensibilizarse, empezando a tomar dosis muy pequeñas, que luego irán aumentándose hasta lograr una tolerancia normal hacia el polen.
Como comprobar si tienes alergia al polen.
Es fácil y sencillo: colocarse unos granitos de polen en el pliegue del codo (la parte interna) y ponerse un apósito o tirita y dejar unas horas. Si en el transcurso de las horas hace una reacción alérgica (se pone colorado y con picazón)… es que eres alérgico y en tal caso es recomendable que visites a un medico antes de tomar vía oral el polen. Si no hay reacción, significa que todo esta OK.